lunes, 25 de agosto de 2014

Cívica, un ejemplo de arquitectura margivagante en Guadalajara

Arquitectura margivagante es aquella que se construye al margen de las normas, por personas que llevan sus ideas en forma de propio universo en construcciones inventadas, que les lleva gran parte de su vida y que por España, no sé qué tendrá la autopista N-II y alrededores, se concentran varios ejemplos que nos fascinan por su creatividad. 

Fuera de España hay muchos ejemplos, quizás el más conocido sea el Mausoleo del Cartero Cheval en Francia, pero por aquí tenemos varios edificios como la catedral de Justo en Mejorada del Campo o la casa Cueva en Alcolea del Pinar. La arquitectura que hoy visitamos también fue fruto del esfuerzo e ideas de un cura que trabajó porque la pared de piedra se convirtiese en un laberinto de escaleras, pasillos y balconadas de espectacular singularidad. 

Se encuentra aproximadamente a 18 minutos del pueblo de Brihuega, en la CM2011 dirección Masegoso de Tajuña. Lo cual la sitúa en un entorno excepcional para descubrir la ruta de los castillos en Guadalajara, así como los pueblos cercanos.

Parece mentira que en esta tierra casi desierta, podamos encontrar un microclima gracias al río Tajuña, el cual inunda todo de vegetación y hace nos olvidemos de la civilización por un instante. Hay que estar atento para encontrarse con esta edificación, pero se divisa fácilmente una vez que la tenemos encima. Para entrar, hay una puerta subiendo la ladera hacia su zona de atrás, que es residencial y donde los vecinos os dirán que no hay entrada, pero si buscáis veréis una puerta roja por la cual se accede al monumento y con ello a sus galerías. Unos pasos situándonos hacia Brihuega, veremos una cascada de gran belleza que no hace sino hacer más bucólico el ambiente. 







































lunes, 18 de agosto de 2014

Minas del Horcajo, el pueblo al cual se accede por un túnel


El Horcajo es un pueblo de Ciudad Real, situado entre Brazatortas y Fuencaliente, al cual se accede si el ojo está avispado y se percata de un pequeño letrero que nos indica los 7 kms por un camino de tierra entre encinares hasta la llegada de un túnel. 



El túnel, de un sólo sentido, permanece apagado, por lo que deberemos pulsar un botón verde situado a su entrada, lo cual hará que un semáforo nos de paso y al mismo tiempo se enciendan las luces. Tras aproximadamente un kilómetro, la vista del pueblo casi abandonado nos hace trasladarnos a otra época.

En su tiempo, emplazamiento minero que llegó a contar con una población de 2000 personas, a día de hoy y debido al cierre de las minas en los años 60, apenas cuenta con 9 habitantes en varias casas que aún se mantienen en pie. 

Horcajo cuando gozaba de esplendor
Entre los atractivos turísticos, podemos ver edificaciones semi derruidas de algunas entradas a los pozos mineros (que no son visitables en su interior) de extraordinaria belleza arquitectónica, así como la iglesia, a la cual se le anexionó una capilla, y la antigua escuela a las cuales la vegetación les ha ido ganando terreno. 

Un pueblo que lucha por no quedar en el olvido, cuyo túnel se intentó cerrar, cerrando con ello la vía de acceso por carretera que les habría dejado aislados, y que gracias a la oposición de los vecinos sigue manteniéndose en pie. Remanso de paz que permanece como lugar para desconectar de todo cuya tranquilidad sólo es perturbada por el AVE que pasa a escasos metros atravesando la montaña. 

En el documental que os comparto nos cuentan más curiosidades y está pendiente la edición de un vídeo que próximamente enseñaremos. Sin lugar a dudas un enclave que merece la pena visitar por su singularidad y por la belleza del entorno. 

En el mapa que os comparto he marcado los principales puntos de interés, como véis poco tiene que ver ya con la imagen que puse más arriba. Del mismo modo abajo podéis ver una selección de fotografías tomadas en nuestra visita. 





Hay dos pulsadores, uno por cada entrada al túnel para encender las luces y dar vía verde ya que es de un sólo sentido


Iglesia


Interior de la capilla








Entrada al pozo de la mina

Uno de los pozos de las minas

Túnel de entrada y salida al pueblo

Capilla anexa a la iglesia


Restos de casas derruidas


Iglesia y escuelas donde hasta hace poco los niños seguían jugando en sus columpios ahora comidos por la vegetación


El AVE a su paso por Horcajo